7 SÚPER SEMILLAS QUE DEBES INCLUIR EN TU DIETA
Me sorprendí cuando me enteré de los grandes beneficios de incluir las semillas en mi dieta y eso me animó a investigar más sobre ellas y sobre cómo consumirlas.
Por Alejandra García
Fundadora @mujeresinternacionaleschile
1- Semillas de Girasol
Ricas en proteínas y aminoácidos, ácido fólico, magnesio, potasio, fósforo y calcio.
Ayudan a regular el colesterol, la grasa corporal, a reforzar el sistema cardiovascular, mejoran el ánimo, previenen ciertos tipos de cáncer y mejoran las funciones cognitivas.
2- Semillas de Lino
Ricas en omega 3, vitamina C, E y calcio.
Regulan la hipertensión, el colesterol, son excelentes para el corazón y el hígado. Ideales para las dietas ya que tienen un efecto saciante, ayudan a eliminar toxinas y evitan el envejecimiento prematuro, en especial de la piel, ya que ayudan a regenerar los tejidos.
3- Semillas de Calabaza
Ricas en fibra, omega 3 y 6, vitamina B, magnesio y Zinc.
Ayudan a subir los niveles de estrógenos y a reducir el colesterol en sangre. Su aceite mejora el dolor de cabeza y el ánimo. Son también capaces de estabilizar el sistema nervioso.
4- Semillas de Amapola
Gran fuente de calcio, vitamina A, omega 3 ,6 y son ricas en fibra.
Reducen los niveles de colesterol en la sangre, ayudan a combatir el estrés y el dolor, ayudan también al fortalecimiento de los huesos.
5- Semillas de Chia
Ricas en antioxidantes, omega 3, zinc, selenio, fibra y vitamina E.
Mejoran el sistema inmune, aportan gran cantidad de energía, por lo que su uso es bueno para deportistas. Ayudan a perder peso y también en el fortalecimiento del cabello y uñas.
6- Semillas de Quinoa
Ricas en proteínas y antioxidantes, contienen vitamina B y E, omega 3 y 6, fibra, altas en minerales como calcio, hierro, magnesio, manganeso, potasio.
Ayudan a regular el azúcar en sangre, son óptimas para celíacos, ayudan a controlar el peso, mejoran el tránsito intestinal.
7- Semillas de Sésamo
Ricas en lecitina, grasas insaturadas y vitaminas del complejo B
Combaten el estrés y ayudan al funcionamiento de los sistemas nervioso y digestivo.
Cómo consumirlas
Se pueden consumir diariamente de innumerables maneras, como snack; en ensaladas; en sopas; como cubierta de carnes, pescados y sushi; en aderezos; en pasteles, tartas, galletas, queques y panes; con yogurt; en un batido de frutas; con cereales; en postres; etc.
Cualquiera sea la forma en que las incorpores a tu alimentación, serán siempre un aporte a tu organismo.